Las fuentes comunicaron al diario Al-Watan que la nueva caravana procedente del norte del vecino Iraq ingresó al país a través del ilegal cruce fronterizo de Al-Walid y se dirigió a los puntos del Pentágono establecidos en su mayoría en los campos de petróleo y gas en la provincia de Hasakeh.
Detallaron que la columna conformada de 20 vehículos y camiones transportaba materiales logísticos, cajas cerradas y bloques de cemento.
Revelaron que militares estadounidenses en Siria fueron reforzados con mil 500 efectivos nuevos, cuya misión es entrenar a las milicias separatistas como las Fuerzas Democráticas Sirias y el Ejército de Siria Libre.
El Pentágono anunció recientemente el envío a Oriente Medio de aviones de combate avanzados F-35 y F-16 y un destructor naval, y alegó estos refuerzos están destinados a enfrentar las crecientes maniobras realizadas por los pilotos rusos sobre Siria.
Reportes de prensa informaron además, que las fuerzas norteamericanas reforzaron recientemente sus enclaves con tres sistema de lanza misiles Himars, con el pretexto de proteger sus bases ante la existencia de riesgos de seguridad.
El Pentágono tiene en Siria al menos una docena de bases, en su mayoría en los campos de petróleo y gas en la región nororiental de Al-Jazzira, principalmente en Hasakeh, mientras mantiene una en la zona de Tanef, en la frontera con Iraq, para impedir cualquier comunicación terrestre entre estos dos países.
Siria denunció en varias ocasiones que las fuerzas de Estados Unidos entrenan y forman a milicias separatistas y extremistas para seguir desestabilizando el país y prolongar la guerra.
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