La noticia corrió como pólvora, pues en la medianoche del 13 de mayo los afiliados del gremio iniciaron el paro que se unió al que que ya tenían los guionistas por similares razones desde el mes de mayo.
Esta convergencia desencadenó el primer paro general que afecta a la industria de Hollywood en los últimos 63 años.
La semana pasada, al cumplirse siete días de arrancar la huelga, Fran Drescher, presidenta del Sindicato de Actores de Cine-Federación Estadounidense de Artistas de Televisión y Radio (SAG-Aftra) advirtió que no habían querido sentarse a conversar con ellos.
Conocida por su papel protagónico en la comedia en seis temporadas “La niñera” (The Nanny-1993), la actriz que lidera el gremio planteó que «la otra parte» de la disputa «les da largas».
Se trata de la Alianza de Productores de Cine y Televisión (Amptp), una asociación comercial que representa a los estudios Paramount, entre otros.
La Amptp dice que el sindicato tergiversó las negociaciones y además que les hicieron una oferta a los actores, pero Drescher preguntó «¿por qué iríamos a la huelga si nos ofrecieron un trato tan increíble? No tiene sentido».
Los actores quieren respuestas a sus preocupaciones sobre el uso de la inteligencia artificial en las producciones y exigen salarios más altos, así como compensaciones justas por los derechos de streaming en las plataformas Netflix o Disney Plus, por mencionar unos.
Drescher advirtió que en el pasado, durante la época de la comedia «La niñera», el éxito de una serie dependía de su longevidad y de su capacidad para reunir espectadores e ingresos publicitarios, lo que daba lugar a varias temporadas con numerosos episodios.
Este modelo generaba ingresos incluso después de su finalización, pero con el streaming todo cambió radicalmente, explicó.
Algunos observadores señalan que el impacto es inminente. En junio, Disney anunció varios cambios en su calendario de estrenos en salas debido al paro de los escritores y ahora los actores causan aún más turbulencia.
Durante las primeras dos semanas de julio no se expidió ningún permiso para producciones de televisión con guiones en el condado de Los Ángeles, aseguró FilmLA, un rastreador de las actividades de la industria.
Si bien de momento –reseñó The New York Times- los espectadores cinematográficos tardarán en notar la diferencia porque la mayoría de las películas con estrenos programados para este año ya se filmaron, con lo televidentes no será igual, pues se podrían postergar las nuevas temporadas de varias series populares.
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