Un comunicado, divulgado este lunes en el sitio digital especializado Infodifesa, se refiere a recientes declaraciones de Crosetto al diario Corriere della Sera y otros medios informativos locales, donde planteó que “la elección de incorporarse a la Ruta de la Seda fue un acto improvisado y perverso, del gobierno de Giuseppe Conte”, en 2019.
En la actualidad, según dijo, “el tema es volver sobre nuestros pasos sin dañar las relaciones”, porque “es cierto que China es un competidor, pero también es un socio, y no es casualidad que la primera ministra haya anunciado, precisamente desde Estados Unidos, que irá a China”.
Durante una conferencia de prensa al final de su visita a Washington, el 27 y 28 de julio, la mandataria italiana, Giorgia Meloni, admitió que abordó ese tema en su reunión del jueves último con el presidente norteamericano, Joe Biden, contrario a que Roma mantenga ese pacto con Beijing.
Reveló que ambos dialogaron sobre la necesidad de asegurar cadenas de suministro estratégicas a nivel global, sobre los cual existe una “gran convergencia” entre Italia y Estados Unidos, y planteó que los países occidentales deben encontrar el equilibrio adecuado entre la “apertura de mercados” y la protección de sus bases industriales”.
En una entrevista con la cadena televisiva estadounidense Fox News, al cuestionársele sobre la presunta próxima salida de Italia del acuerdo con China sobre la Franja y la Ruta de la Seda, Meloni afirmó que “aún no lo decidí” y en relación con su posible viaje a Beijing dijo que “debe ser una de las próximas misiones a organizar”.
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