El sondeo, conjunto con el Siena College, arrojó que Biden muestra una posición más fuerte, pero igualada en un posible desafío con el exmandatario (2017-2021).
De acuerdo con el tanteo el actual ocupante del Despacho Oval, de 80 años, quien busca la reelección, obtendría como el magnate neoyorquino, de 77 años, un 43 por ciento de los votos en los comicios venideros.
El estudio de opinión señaló que el 45 por ciento de los electores demócratas respaldan a Biden como candidato, una cifra que aumentó desde julio del pasado año, cuando solo el 26 por ciento apoyaban su reelección.
Para el rotativo, tales resultados estarían asociados a los resultados el Partido Demócrata en los comicios de mitad de mandato de noviembre último, así como a la desaceleración de la inflación, un indicador que llegó a alcanzar números no vistos en cuatro décadas.
El sondeo indicó que Biden ganaría entre las mujeres, los estudiantes universitarios y los afroamericanos; sin embargo, presenta fisuras entre los votantes latinos, que, al parecer, inclinan su balanza hacia los republicanos. La encuesta del Times sale tras otra pesquisa similar en la cual Trump aparece, pese a todos sus enredos con la justicia, favorito frente al resto de los candidatos de su partido de cara a primarias.
Mientras Trump cuenta con el 54 por ciento de apoyo su más cercano rival, el gobernador de Florida, Ron DeSantis, solo cuenta con el 17 por ciento.
Los demás contendientes del campo republicano se mantienen casi a ras de suelo, pues el exvicepresidente Mike Pence, el senador Tim Scott y la exembajadora ante la ONU Nikki Haley recibieron un tres por ciento; en tanto, el empresario Vivek Ramaswamy y el exgobernador de Nueva Jersey Chris Christie lograron apenas dos por ciento.
Otro artículo publicado este propio marte en el Times dice que más republicanos dicen que el expresidente Trump cometió «graves delitos federales», pero le siguen apoyando.
Trump tiene fijado juicio para el 20 de mayo de 2024, en plena campaña electoral, por el caso de los documentos clasificados que se llevó de la Casa Blanca al término de su mandato y que fueron hallados en su residencia de lujo en Mar-a-Lago, Florida.
El exgobernante fue imputado con decenas de cargos federales, espera nuevas acusaciones, siguen las investigaciones en su contra y su grupo de acción política ya gastó más de 40 millones de dólares en representación legal.
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