De acuerdo con un mensaje oficial, la entidad internacional alertó sobre el estado de estancamiento que vive el país desde hace ocho años así como las latentes amenazas que apuntan a las rutas de navegación revelando la indiferencia del grupo rebelde houthi hacia las leyes.
Por su parte, el gobierno yemení condenó la intención de esa formación de frustrar todos los esfuerzos tranquilos, señalando que la presencia del grupo en la costa resulta una amenaza para la seguridad del suministro energético global.
Las amenazas hechas por los líderes del grupo Houthi de apuntar a las líneas navieras en el mar Rojo, Bab al-Mandab y el golfo de Adén, y considerar el mar Arábigo y el océano Índico como zona de operaciones militares revelan su verdadera naturaleza como grupo, declaró el Ministro de Información de Yemen, Muammar Al-Eryani.
En un comunicado difundido por la agencia de noticias nacional Saba, Al-Eryani, señaló que la formación continuaría controlando partes de la franja costera yemení, y estaría estacionado en los puertos de la ciudad de Hodeidah.
Asimismo, solicitó a las Naciones Unidas y en particular al Consejo de Seguridad que manifiesten una posición clara sobre estas declaraciones del grupo Houthi y que cumplan con sus responsabilidades legales al hacer frente a las actividades que amenazan con socavar las posibilidades de calma y exacerbar la situación humanitaria en Yemen. .
La ONU calificó la situación en la empobrecida nación árabe como la peor crisis humanitaria del mundo.
Cerca del 80 por ciento de la población yemenita depende de la ayuda para subsistir en medio de la más grave hambruna en décadas provocada por el largo conflicto, advirtieron otros organismos internacionales.
rgh/chm