Según comunicó Hydrometcentre en su página oficial de Telegram, se pronostica que el viernes 4 de agosto en Moscú se registrarán temperaturas de entre 28 y 30 grados centígrados, el sábado de hasta 32 y el domingo de 29 a 34 grados.
Por su parte el director científico del Hydrometcentre, Román Vilfand, comentó que el tiempo en la capital rusa será «peligroso» esos días, porque es una ola de calor seco, que puede afectar a las personas de la tercera edad, y recomienda en esas fechas mantenerse hidratado y evitar exponerse al sol.
Igualmente precisó que a partir del 7 de agosto las altas temperaturas deben comenzar a disminuir, aunque la población debe mantenerse al tanto de posibles nuevas olas de calor.
“Este verano realmente, hasta el momento, ha sido atípico para las regiones de Rusia occidental, pues las temperaturas apenas han superado los 15 grados Celsius, y ha llovido abundantemente, a diferencia de otras zonas de Europa y Asia Central donde han prevalecido altas temperaturas”, recordó Vilfrand.
oda/gfa