Las autoridades castrenses declararon que este fue un nuevo intento de las formaciones armadas ucranianas de llevar a cabo un ataque terrorista con vehículos aéreos no tripulados contra ese territorio ruso, que fracasó y que por suerte no hubo que lamentar víctimas ni daños materiales.
Anteriormente, el gobernador de la región de Kaluga, Vladislav Shapshá, escribió en su canal de Telegram que seis drones fueron derribados por las fuerzas de defensa antiaérea en el suroeste de la región.
A principios de junio pasado, dos drones cayeron en una autopista M3 Ukraina que atraviesa la provincia de Kaluga y se extiende de Moscú a la frontera de Rusia con Ucrania.
A comienzos de julio, el Ministerio de Defensa ruso informó de un fallido ataque con misiles antiaéreos S-200, modificados para destruir blancos terrestres, contra instalaciones en la provincia de Kaluga.
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