También, la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), advirtió que el riesgo de incendios forestales es mayor ante un panorama que se complica por la extensión de las elevadas temperaturas hasta el domingo.
El nivel máximo de alerta (rojo) fue establecido en zonas de Andalucía, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Madrid y País Vasco, y aunque se espera un ligero descenso a partir de mañana jueves, los valores no serán tan significativos.
En el este y sur de la Península se espera que el mercurio suba por encima de los 40 grados y hasta 45 en varias ciudades de Andalucía, indicó la Aemet.
Su portavoz, Rubén del Campo, señaló que en la zona centro, Madrid y provincia de Cuenca, se podría llegar a 40/42 grados, y en el este de Andalucía, en Jaén y Granada, los registros sobrepasarán los 44. Igualmente, de forma inusual en el País Vasco, Cantabria, Asturias y Galicia, las temperaturas serán elevadas.
En la tarde, se esperan tormentas secas en la franja central y oriental de España, con poca lluvia y rachas fuertes de vientos. De hecho, si bien el sol predomina en el ambiente, la llegada de polvos del Sáhara mantiene el cielo con nubosidad.
La incidencia de tormentas secas, hace más probable los fuegos en los bosques. Generan el roce entre gotas de agua y con una carga de electricidad estática, caen y provocan los siniestros, alimentados además por el ambiente extremadamente cálido.
Cambios bruscos de la dirección del viento y la densidad del aire, convertirán al país ibérico en un hervidero amenazado de distintas maneras, la más terrible, los incendios forestales cercanos a poblaciones.
La mayor parte del país seguirá en riesgo extremo de incendio y lloverá de forma tenue en el norte de Galicia y de Asturias, con la esperanza de que el fin de semana remonten los termómetros y pueda dejar de hablar de ola de calor.
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