Con dos lesiones muy sensibles al inicio de la temporada de LaLiga de Fútbol de España, del belga Thibaut Courtois en la portería, y del central brasileño Eder Militao, finalmente la “casa blanca” decidió resguardar mejor el arco.
Tanto Courtois como Militao sufrieron la rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda durante el entrenamiento y en el partido del sábado ante el Athletic de Bilbao, respectivamente.
Ancelotti ofreció todo su apoyo al portero ucraniano Andriy Lunin, quien fue titular frente a los bilbaínos, pero el club decidió de todas formas buscar un refuerzo y lo hizo con Kepa, procedente del Chelsea inglés.
Llega en forma de cesión después se comenzar como titular del Chelsea, después pasó al banquillo tras la llegada de Édouard Mendy y en la segunda mitad de la pasada temporada recuperó el sitio.
Fue titular en la mayoría de los encuentros con el técnico argentino Mauricio Pochettino, pero el contrato a otro español, Robert Sánchez el pasado 5 de agosto, dejó de serlo y ahora recala en el Real Madrid.
Kepa tiene 28 años de edad y anteriormente estuvo a punto de fichar por los merengues en 2018, cuando parecía listo para salir del Athletic Club por 20 millones de euros, pero el técnico francés Zinedine Zidane se inclinó por el costarricense Keylor Navas.
El guardameta oriundo de Ondárroa, País Vasco, defendió el arco del Chelsea durante 163 partidos, en los que encajó 175 goles y dejó su portería a cero en 59 ocasiones. En las últimas convocatorias integró la selección nacional de España dirigida por Luis de la Fuente, como suplente de Unai Simón.
De momento, el Real Madrid parece decidido a no ir al mercado por un zaguero central, al confiar en el austriaco David Alaba, el alemán Antonio Rudiger y el español Nacho Fernández.
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