Aunque como aclaró no es competencia del Gobierno decidir sobre los cargos de la entidad del balompié, el presidente del Ejecutivo, Pedro Sánchez, señaló que las disculpas ofrecidas por Rubiales son “insuficientes y que tiene que continuar dando pasos”.
Las palabras del jefe del Gobierno fueron interpretadas como una sugerencia imperativa hacia la dimisión del directivo, una figura bastante controvertida que añadió más leña al fuego con un video poco convincente pidiendo perdón por haber dado un beso a la jugadora en medio de la ceremonia de premiación de la Copa Mundial de Sídney.
“Lo que vimos fue un gesto inaceptable. Creo que las disculpas que ha dado no son suficientes, hasta incluso creo que no son adecuadas y que por tanto tiene que continuar dando pasos para aclarar lo que vimos todos”, remarcó Sánchez en rueda de prensa en Moncloa, quien a primera hora de la mañana recibió al equipo.
El presidente en funciones de la administración de España opinó que el comportamiento de Rubiales manifiesta “algo que en nuestro país queda mucho por recorrer (…) debería aclarar un comportamiento que es, a todas luces, inaceptable y que no conecta con el sentir mayoritario de la ciudadanía”.
Igualmente, anotó que la Federación no pertenece a la estructura ni al organigrama del Gobierno, por lo que en este caso deslizó que el cargo de Rubiales es ‘elegido y destituido por sus asociados’.
Otras figuras políticas del conservador Partido Popular (PP), la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, asociaciones de futbolistas, exjugadores y un espectro amplio de intelectuales, repudiaron la actitud de Rubiales.
El gobernante confirmó la concesión a las jugadoras de la Medalla de Oro de la Real Orden del Mérito Deportivo que entrega el Consejo Superior de Deportes (CSD).
También, la Placa de Oro para el conjunto de la selección. Tras recibir una camiseta firmada por las integrantes de la Roja que vencieron a Inglaterra 1-0 en la final de la Copa Mundial, resaltó que tienen el ‘eterno agradecimiento de la sociedad, que ha disfrutado y vibrado por cómo lo ha hecho” y “sobre todo con el corazón”.
“En 2010 dijimos, somos campeones del mundo, ahora, en 2023, decimos con mucho orgullo, somos campeonas del mundo (…) es un éxito que lógicamente os pertenece como generación (…), pero que también rinde tributo a otras generaciones (…)”, apostilló.
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