Anticipado hace una semana, el estirón alcanzó 28 centavos dólar en algunos casos a partir de este martes. El carburante súper llegará a 4.93, 4.94 y 4.98 dólares en centro, occidente y oriente, respectivamente.
La entidad reguladora en su actualización de precios cada 15 días elevó de forma seguida los costos en las últimas quincenas aduciendo fluctuaciones en los mercados y bajas disponibilidades del líquido para aportar una nueva preocupación a la población.
La gasolina regular se venderá a 4.68, 4.69 y 4.72 dólares en el centro, occidente y oriente del país, mientras el diésel bajo en azufre escalará más alto que los demás carburantes desde los 27 hasta los 28 centavos y los conductores de oriente serán los más afectados con un alza hasta 4.36, centro 4.31 y occidente 4.32 dólar por galón.
La Dgehm destacó además la influencia en los precios de las reducciones en sus producciones de Arabia Saudita y Rusia, entre los principales proveedores y productores mundiales.
Algunos expertos anticipan que de continuar la escalada, pronto habrá una merma en las compras, pues las familias comenzarán a sacrificar los viajes de ocio o diversión.
No obstante, previsiones de mercados indican que la industria automotriz resiste a la crisis económica y se prepara para un récord de ventas este 2023, con una proyección de colocar en el mercado salvadoreño cerca de 20 mil nuevas unidades.
Por otra parte, algunos expertos valoran que sube la gasolina y la canasta básica alimentaria ya sobrepasa los 250 dólares, en una economía que es afectada por procesos inflacionarios, baja inversión de capital extranjero y el imprevisible impacto del cambio climático y la sequía en la producción de alimentos.
Ejemplos citados por el diario El Mundo señalan que el precio del frijol, uno de los granos básicos en la alimentación de los salvadoreños junto al maíz, ahora es 156 por ciento más caro que hace dos décadas cuando se compraba la libra a 41 centavos de dólar.
Estadísticas del Ministerio de Agricultura y Ganadería señalan que con lo que se paga ahora por una libra de frijol, a inicios del milenio se podían comprar hasta dos libras y media.
Diferentes crisis económicas y sociales, así como eventos climáticos (lluvias o sequías) afectaron los cultivos y, a su paso, impactaron de forma directa o indirecta en el costo de los alimentos durante estos años.
El precio de la canasta básica alimentaria rompió récord en julio pasado, cuando llegó a 250.76 dólares, un 68.7 por ciento del salario mínimo vigente para el sector comercio.
Esta escalada de precio de los combustibles y de la canasta básica subió el costo de la vida de 400 a 700 dólares entre 2021 y 2022, un incremento de 75 por ciento, indicaron fuentes bancarias al concluir que el salario mínimo actual es insuficiente.
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