De acuerdo con un informe de la institución, los cargamentos de droga van ocultos en los contenedores que salen desde los puertos marítimos de la nación andina hacia países de Europa principalmente.
Las autoridades no revelaron la identidad de los propietarios ni los nombres de las compañías legalmente constituidas, sin embargo, detallaron que detrás de esos grupos empresariales están ciudadanos albaneses que ingresaron a Ecuador en 2009 bajo la fachada de inversionistas para comprar o crear firmas.
Este jueves, la Dirección Nacional de Investigación Antidrogas aquí pidió al Ministerio de Agricultura y Ganadería suspender las licencias de exportación de las compañías reincidentes en los casos de narcóticos.
El auge de esas actividades ilegales en Ecuador se debe, entre otras cuestiones, a la posición geográfica de la nación, justo entre Colombia y Perú, dos de los principales productores de cocaína del mundo, y por contar con puertos considerados funcionales para el narcotráfico.
El otro factor que hace de este país suramericano un escenario ideal para el tráfico de sustancias ilícitas son las escasas inversiones sociales, lo cual estimula a muchos jóvenes a sumarse a las mafias en busca de ingresos, apuntan analistas.
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