Durante una reunión celebrada en la sede del Ejecutivo, las dos partes analizaron las medidas tomadas para facilitar la acción conjunta para superar las dificultades, mejorar el rol del sector empresarial y aumentar el intercambio comercial bilateral.
También abordaron los mecanismos de dar seguimiento a la implementación de los acuerdos y entendimientos alcanzados y las formas de fortalecer las relaciones bilaterales en diversos campos para lograr el interés común de los dos países y pueblos amigos.
El jefe de Gobierno explicó las dificultades que enfrenta la economía siria a consecuencia del injusto bloqueo y la ocupación de los yacimientos petroleros y recursos agrícolas por parte de las fuerzas estadounidenses.
Apreciamos y agradecemos al gobierno y pueblo de Irán por el apoyo que brindan a Siria en diversos campos, dijo Arnous.
Por su parte, el jefe de la diplomacia persa destacó el deseo de su país de ampliar las áreas de cooperación a largo plazo, particularmente en los campos de la energía y el uso de monedas nacionales en las transacciones comerciales y el intercambio de productos básicos.
Irán seguirá apoyando a Siria para enfrentar el asedio económico que sufre, indicó.
Damasco y Teherán mantienen una alianza estratégica desde el triunfo de la Revolución Islámica en 1979, fortalecida con el apoyo iraní a la lucha contra el terrorismo durante la guerra que enfrenta esta nación árabe desde 2011.
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