De acuerdo con el sondeo, realizado junto a la empresa Ipsos, el 58 por ciento de los franceses teme caer a corto plazo en la precariedad, mientras uno de cada tres asegura que tiene dificultades para conseguir una alimentación sana y realizar tres comidas diarias.
Por otra parte, un 45 por ciento de los entrevistados reconoció aprietos para pagar algunos medicamentos, considerados “mal reembolsados por la seguridad social”.
El estudio de la organización no gubernamental SPF e Ipsos también recoge una elevación sin precedentes, de 114 euros, del techo medio para la pobreza, situado en mil 377 euros netos por mes.
Al respecto, precisa que ese valor definido por los franceses fija el umbral por debajo del cual una persona sola puede considerarse pobre en Francia.
En cuanto a Europa, la encuesta muestra que un 48 por ciento de los seres humanos teme caer en una situación de precariedad en los próximos meses y que la mitad lidió en el último semestre con al menos un escenario de privación en los sectores salud, calefacción, alimentación y transporte.
Asimismo, el 55 por ciento de los encuestados en una decena de países europeos, entre ellos Alemania, Grecia, Italia, Portugal y Reino Unido, declaró que su poder de compra disminuyó en los tres últimos años.
La pesquisa del SPF e Ipsos reveló igualmente que tres de cada 10 europeos participantes dijo que ya sintió hambre alguna vez y “se saltó” una de las comidas del día.
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