Para llevar a cabo el análisis, los técnicos del Ministerio de Salud Pública obtuvieron muestras del preciado líquido de distintas fuentes. El 34 por ciento de las porciones recogidas de botellones tuvo presencia de la bacteria Escherichia coli, también conocida como E. coli.
Asimismo, el estudio reveló que la contaminación es mayor en la de manantial y de tubo, que alcanzó el 84 por ciento.
De acuerdo con la pesquisa, esta problemática tiene una mayor incidencia en las provincias ubicadas en la Amazonía.
Especialistas de la cartera de salud consideran que, un niño que consume agua de mala calidad tiene enfermedades diarreicas y, a su vez, puede padecer desnutrición.
Recientemente, la directora de la red Pacto Global Ecuador, de Naciones Unidas, Mariana Tufiño, denunció que existen en esta nación problemas como la falta de agua potable y de condiciones para que los niños puedan tener un desarrollo integral.
Por su parte, el secretario técnico del programa Ecuador Crece Sin Desnutrición, Erwin Ronquillo, declaró que cuando se posesione un nuevo presidente en el país sudamericano, la Secretaría trabajará en el fortalecimiento de la prevención, que es la clave para reducir la tasa de desnutrición aquí.
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