La demanda de las organizaciones a conservadores y laboristas radica en el derecho legal de consulta ante la introducción de nuevas tecnologías en los escenarios laborales.
Los delegados solicitaron, asimismo, que los músicos tengan la posibilidad “irrenunciable” de decidir si sus composiciones clasifican para su uso por la IA y la obtención de un pago justo si ellos lo permiten.
En este sentido, los sindicatos presionarán al gobierno para que financie la recapacitación de los trabajadores despedidos como consecuencia de la IA y la garantía de políticas de protección en apoyo a los empleados en el nuevo puesto laboral.
Asimismo, el TUC asumirá una campaña contra esa herramienta en los espacios de trabajo donde no exista un convenio colectivo explícito.
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