El anuncio llega en un momento en que los consumidores ya debieron enfrentar una subida de la luz del 10 por ciento a primeros de agosto, tras el anuncio por parte del gobierno de ir eliminando paulatinamente hasta final de año el blindaje tarifario que protegía a las familias francesas.
«A lo largo de este periodo de crisis, hemos separado claramente el cálculo de las tarifas reguladas teóricas, que es la aplicación de la fórmula de cálculo, de la decisión que corresponde al Gobierno, es decir, la parte que es aceptable y la parte que debe financiar el presupuesto del Estado», subrayó Wargon.
La subida se había limitado previamente al 15 por ciento el 1 de febrero de 2023, mientras que, según los cálculos de CRE, deberían haber subido un 99 por ciento para esa fecha.
Debido a ello, la presidenta de la CRE señaló que “avanzaremos hacia aumentos que serán significativos, pero que no serán del orden del doble ni superiores al 50 por ciento”.
El gobierno francés estima que el coste del blindaje tarifario ha supuesto para las arcas públicas unos 110 mil millones de euros entre 2021 y 2023, y para 2024 su reducción debería generar un ahorro de casi 14 mil millones de euros, según el Ministerio de Finanzas.
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