De acuerdo con el Ministerio de Relaciones Exteriores, «la designación es infundada y de naturaleza maliciosa», por lo que el gigante asiático presentó «solemnes gestiones» ante la parte norteamericana.
«El Gobierno chino concede gran importancia al control de las drogas y hasta la fecha ha clasificado 456 tipos de sustancias como controladas bajo sus leyes relacionadas con esta supervisión, lo que le convierte en uno de los países con más estupefacientes bajo vigilancia en el mundo y con los controles más estrictos», dijo la vocera Mao Ning.
Según la portavoz, en la nación asiática un total de 38 precursores químicos están catalogados como sustancias controladas, 14 más que en las clasificaciones de las Naciones Unidas.
«China es un modelo de gobernanza global en materia de drogas, es el país que está implementando sus políticas antidrogas de la manera más estricta y exhaustiva, y esto es ampliamente reconocido por la comunidad internacional», añadió.
Por otro lado, subrayó que Estados Unidos representa menos del cinco por ciento de la población mundial y consume el 80 por ciento de los opioides a nivel global.
«Se encuentra entre los países con la mayor demanda de estupefacientes y no tiene derecho a criticar el trabajo de control llevado a cabo por China», enfatizó.
Mao Ning señaló que las causas profundas de la proliferación de narcóticos en Estados Unidos son sus capacidades débiles y su control ineficaz.
Recientemente el presidente Joe Biden sumó a China a la lista de países de tránsito y productores de drogas.
Además del gigante asiático, integran el listado Afganistán, Bahamas, Belice, Bolivia, Myanmar, China, Colombia, Costa Rica, República Dominicana, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Haití, Honduras, India, Jamaica, Laos, México, Nicaragua, Pakistán, Panamá, Perú y Venezuela.
ro/idm