El sospechoso permanecía detenido en la cárcel El Inca, en el norte de Quito, y es el séptimo vinculado al atentado que cobró la vida del político ecuatoriano.
La Fiscalía General del Estado (FGE) dispuso el levantamiento del cadáver en la cárcel en esta capital y ordenó las prácticas de las diligencias para determinar las causas de la muerte.
Otros seis primeros sicarios que se encontraban en la Penitenciaría del Litoral, en la ciudad costera de Guayaquil, fueron asesinados el viernes en la tarde.
La FGE inició este sábado una investigación contra el SNAI pues, según la institución, había una orden de traslado a otro centro de detención de los sospechosos del crimen que murieron en El Litoral.
Por ello, el órgano judicial investigará al SNAI, por no acatar la orden de traslado de los seis colombianos imputados por el atentado contra Villavicencio.
Desde esta mañana, el Gabinete de Seguridad sesiona en el Palacio de Carondelet (sede de Gobierno) para tratar la crisis en el sistema penitenciario, sin embargo, no pudieron prever que el séptimo sospechoso podía ser asesinado.
Por otro lado, la plataforma SOS Cárceles Ecuador denunció que los seis presos pidieron a la Fiscalía y al SNAI su traslado a una cárcel más segura, petición que les fue negada, según la fuente.
Los procesados fueron detenidos horas después del asesinato de Villavicencio, el pasado 9 de agosto, por ser presuntamente los autores materiales del crimen.
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