El lugar escogido para el reconocimiento fue el salón de la escuela del Club Mauricio Baéz, en esta capital, donde más de un centenar de representantes de esa organización, encabezados por su secretario general Miguel Mejía, además de miembros del cuerpo diplomático y otras organizaciones amigas, se dieron cita para despedir a Soto, quien concluye su misión en Santo Domingo.
La secretaria de Asuntos Internacionales del Miu, Marta Pérez, destacó la laboriosidad, amistad, solidaridad y visión política de la diplomática.
Pérez consideró a Soto digna representante de la Revolución cubana y de su heroico pueblo que resiste el inhumano bloqueo económico, comercial y financiero de Estados Unidos.
Al mismo tiempo, señaló que con su exitosa labor política y diplomática en República Dominicana desde 2018, la embajadora contribuyó a fortalecer las relaciones de amistad, fraternidad y solidaridad entre los pueblos cubano y dominicano.
De su lado, el secretario general del Miu, Miguel Mejía, consideró un acto de justicia hacer este reconocimiento a quien consideró amiga y diplomática ejemplar.
Mejía apuntó que en la persona de Carina reivindicamos esas raíces históricas que unen a las dos naciones y que por momentos algunos tratan de opacar u ocultar.
Emocionada, Soto agradeció a los hermanos de lucha, batallas y victorias -refiriéndose al Miu- por el apoyo incondicional a su país en la lucha permanente contra el bloqueo y en otros momentos difíciles.
La embajadora dijo que cuando se siente tan cerca el cariño del pueblo dominicano y su solidaridad, comprende por qué el líder de la Revolución cubana, Fidel Castro, expresó durante su visita a este país en 1998 que esta es la tierra que más puede enamorar a un modesto corazón cubano.
Así me siento yo, apuntó, y aseguró que Cuba seguirá resistiendo, pero el acompañamiento de la solidaridad siempre será muy importante.
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