Farid Kahhat y Ramiro Escobar señalaron también, en una comparecencia por radio y televisión, en calificar el hecho como un crimen de guerra por el que Israel busca eludir su responsabilidad, culpando al grupo Yihad Islámica
Kahhat precisó que los misiles de Hamas y la Yihad Islámica no tienen la capacidad de causar daño masivo, como el que se registró en el Hospital Al Ahli, destruido por un artefacto de este tipo, de lo que hay suficiente información previa.
“Pero sí la tienen las bombas lanzadas por Israel de manera sistemática, más bombas por día en Gaza que Estados Unidos durante un mes en sus ataques contra Siria e Irak, entre 2014 y 2019”, explicó.
Escobar apuntó que es muy poco posible que la Yihad Islámica sea la autora del atentado contra el hospital palestino.
Agregó que el bárbaro ataque “va a provocar un giro en esta guerra, porque ya ha tenido efectos políticos; ha sido un crimen de guerra inenarrable…”, expresó.
Según Escobar, el ataque al centro médico frustró la reunión promovida por el rey de Jordania entre el presidente de Palestina, Mahmud Abás; el gobernante norteamericano, Joseph Biden; el anfitrión rey Abdalá II y el mandatario egipcio, Abdelfatah al Sisi.
Ante el lanzamiento del misil en el hospital palestino, Abás canceló su participación en la reunión promovida por el monarca jordano, añadió
Kahhat dijo que espera que la visita de Biden a Israel sirva para que este país levante el cerco a Gaza, a cuya población le cortaron el ingreso de agua, electricidad, combustible y alimentos.
Asimismo, permita la entrada de los convoyes de ayuda humanitaria que no pueden cruzar desde Egipto a la martirizada población palestina.
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