En esta tercera ronda, el presidente del Comité Judicial de la Cámara Baja (de 435 miembros) no logró los votos necesarios (al menos 217) para alzarse con el mazo y como le habían pronosticado, perdió más apoyo de sus colegas.
Jordan vio esfumarse el respaldo de 25 republicanos este viernes en comparación con 20 y 22 en la primera y segunda votación, respectivamente.
“Nuestro plan este fin de semana es elegir un presidente de la Cámara de Representantes lo antes posible para que podamos ayudar al pueblo estadounidense”, anticipó Jordan, un miembro de la línea dura del Parido Republicano.
La víspera, la conferencia interna también rechazó una propuesta para empoderar temporalmente al presidente pro tempore, Patrick McHenry, como una medida de emergencia para reanudar los trabajos en la paralizada Cámara Baja.
El respaldado por el expresidente Donald Trump insiste en permanecer en la carrera ante el peligro de que añada más detractores a su candidatura.
Desde el 3 de octubre el hemiciclo fue descabezado luego de que ocho republicanos se unieron a los demócratas para derrocar a Kevin McCarthy de la presidencia en una votación histórica.
El estancamiento en la Cámara Baja -contrtolada por los republicanos por ajustada mayoría- impide tomar decisiones urgentes como el presupuesto para el año fiscal 2024, cuyas negociaciones tienen que estar listas antes de la fecha límite del 17 de noviembre.
También están en pausa otros proyectos legislativos y los pedidos que acaba de hacer Biden para aliados internacionales como Israel y Ucrania.
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