El secretario de Defensa, Lloyd Austin, dijo en un comunicado que las medidas fueron en respuesta a las «recientes escaladas de Irán y sus fuerzas proxy en todo el Medio Oriente», pero no especificó cuántas tropas estadounidenses y agrupaciones aeronavales más se desplegarían allí.
Austin señaló que sostuvo “conversaciones detalladas” con el presidente Joe Biden sobre este asunto y por eso ordenó “una serie de medidas adicionales para reforzar aún más la posición del Departamento de Defensa en la región”.
El jefe del Pentágono indicó que reorientó el traslado del grupo de ataque del portaaviones USS Dwight D. Eisenhower a la zona de responsabilidad del Comando Central, el cual se suma al del USS Gerald R. Ford, que actualmente opera en el Mediterráneo oriental.
También se activó el despliegue de una batería de Defensa Área, así como de batallones Patriot adicionales, subrayó.
Austin añadió que “por último, he dado órdenes de preparación para el despliegue a un número adicional de fuerzas, en el marco de una prudente planificación de contingencias”.
“Seguiré evaluando nuestras necesidades de fuerzas en la región y estudiaré la posibilidad de desplegar capacidades adicionales en caso necesario”, concluyó.
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