El Ministerio de Asuntos Exteriores y Expatriados llamó en un comunicado a la comunidad internacional, en especial al Consejo de Seguridad de la ONU, a prestar atención al proyecto de ese país en la Ribera Occidental.
Es imposible hablar de paz y de implementar el principio de dos Estados mientras las autoridades de esa nación impulsan esa iniciativa, subrayó.
La Cancillería alertó sobre las consecuencias de adoptar ese plan en medio del actual conflicto, que tiene como epicentro el enclave costero, sometido a un bloqueo total y a bombardeos desde hace 17 días.
Reiteramos nuestra condena a esta “guerra destructiva, al genocidio, la limpieza étnica y el desplazamiento forzado cometidos por la maquinaria de guerra israelí”, resaltó.
También denunció las violaciones y los crímenes cometidos por las fuerzas de seguridad y los colonos armados contra ciudadanos palestinos, sus tierras, propiedades y lugares sagrados en la ocupada Cisjordania.
El objetivo del primer ministro Benjamin Netanyahu de prolongar la guerra en la Franja demuestra que su plan es atacar, liquidar y desplazar a más de dos millones de palestinos que viven allí, afirmó.
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