Sobre la escalada de violencia en el conflicto, el Ministerio de Relaciones Exteriores enfatizó que la posición de China «es muy coherente con la de los vastos países árabes».
«Todos esperamos promover un cese al fuego y poner fin a la guerra lo antes posible para evitar que la situación se intensifique aún más o incluso se salga de control», agregó.
Mao reiteró la condena a las acciones que dañan a los civiles y violan el derecho internacional, al tiempo que abogó por la ayuda humanitaria y la prevención de desastres humanitarios más graves.
«Todos apoyamos la solución de dos Estados para hacer realidad el derecho del pueblo palestino a la condición de Estado, el derecho a la existencia y el derecho al retorno, ya que creemos que es la única manera de resolver la cuestión palestina», subrayó.
La vocera respaldó la convocatoria a una conferencia internacional de paz «más autorizada, a mayor escala y más eficaz» lo antes posible, a fin de promover la reanudación de las conversaciones entre Palestina e Israel y «formular un calendario específico y una hoja de ruta con este fin».
«Mientras sea propicio para promover el diálogo, lograr el alto el fuego y restaurar la paz, China lo apoyará firmemente; mientras conduzca a la implementación de la solución de dos Estados y a la promoción de una solución integral, justa y duradera a la cuestión palestina, China hará los máximos esfuerzos», señaló.
El Gobierno palestino acusó hoy a Israel de utilizar el pretexto de la autodefensa como una licencia para matar a la población de los territorios ocupados, lo cual viola el derecho internacional.
El Ministerio de Asuntos Exteriores y Expatriados condenó en un comunicado “la devastadora guerra de ocupación en la Franja de Gaza”, iniciada hace 18 días tras un ataque contra Israel del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás).
La Cancillería denunció el asesinato de miles de civiles y la destrucción de ese enclave costero, donde fueron atacadas viviendas, hospitales, escuelas y sitios religiosos.
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