«Todavía no hay un entendimiento exacto. Continuamos nuestros contactos», señaló el vocero en respuesta a una pregunta sobre si se había producido algún avance en la propuesta rusa de utilizar Moscú como plataforma para preparar un plan de paz.
El 19 de septiembre se produjo un nuevo agravamiento de la situación en Nagorni Karabaj. Bakú anunció el inicio de «medidas antiterroristas de carácter local» y exigió la retirada de los militares armenios de la región.
Ereván afirmó que no había fuerzas armadas armenias en Karabaj y calificó lo que estaba ocurriendo de «agresión a gran escala». Rusia pidió a las partes en conflicto que pusieran fin al derramamiento de sangre y volvieran a un acuerdo diplomático.
El 20 de septiembre, el Ministerio de Defensa azerbaiyano anunció que se había llegado a un acuerdo con la participación del contingente ruso de mantenimiento de la paz para suspender las actividades antiterroristas en Karabaj.
El 28 de septiembre, el presidente de la no reconocida República de Nagorni Karabaj, Samuel Shajramanián, firmó un decreto para la disolución de ese territorio a partir del 1 de enero de 2024.
Se ordenó a la población que estudiara las condiciones de reintegración propuestas por Bakú y decidiera por sí misma si se quedaba.
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