Al intervenir en la 147 Asamblea de la Unión Interparlamentaria acerca de la acción por la paz, la justicia y las instituciones sólidas, la diputada de la nación caribeña señaló que su país respalda la convocatoria urgente del Secretario General de la ONU a poner fin al mal de la guerra.
En el debate general, efectuado en la sede de la Asamblea Nacional de Angola, Mari exhortó a un alto al fuego inmediato en todos los rincones del mundo, y a renunciar a las sanciones que puedan perjudicar la capacidad de respuesta de los países a encontrar soluciones a sus problemas.
En tal sentido subrayó que no es posible hacer silencio y quedar atrapados en mecanismos procesales de la UIP, “duele la pérdida de vidas inocentes, tanto israelitas, como palestinas”, razón por la cual Cuba reclama el “cese de la retórica belicista y reafirma su apoyo a una solución amplia, justa y duradera al conflicto israelo-palestino”.
Enfatizó que la situación actual es “consecuencia de 75 años de ocupación ilegal y de la violación de los derechos inalienables del pueblo palestino en su propio territorio”, y ratificó el llamamiento al cese del fuego y del genocidio.
No será posible alcanzar la paz y la justicia mientras las naciones más poderosas no cumplan sus compromisos con los instrumentos internacionales de control en la esfera del desarme, detengan la militarización del ciberespacio, la coerción y las sanciones unilaterales, dijo en otro momento.
Agregó que igualmente deben terminar los intentos de derrocar gobiernos soberanos mediante métodos de guerra no convencionales.
“Urge establecer un orden internacional justo, democrático y equitativo; eliminar las causas raigales del hambre y las desigualdades; promover el desarrollo sostenible para todos los pueblos; y eliminar potenciales detonantes de conflictos contrarios a la paz y la seguridad internacionales”, remarcó.
Reafirmó el compromiso de los parlamentarios cubanos con la construcción de un mundo mejor, que es “posible, necesario y urgente para la supervivencia humana”.
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