El portavoz de las autoridades de Salud del territorio, Ashraf Al-Qudra, precisó que el centro médico, levantado en la ciudad de Beit Lahia, funciona con un generador de respaldo más pequeño.
Sin embargo, alertó que el personal de la edificación apagó las luces en la mayoría de las habitaciones, los generadores de oxígeno y los refrigeradores de la morgue.
Estas medidas excepcionales permitirán al centro médico funcionar unos días más, sin embargo, si no podemos conseguir electricidad o combustible, nos enfrentaremos a un desastre, advirtió Al-Qudra.
En declaraciones a la televisora estadounidense CNN, el director del hospital, Atef Al Kahlout, confirmó la crisis.
Los sistemas electromecánicos de todo el inmueble dejaron de funcionar, incluidos la ventilación en los quirófanos, la única estación de oxígeno que tenemos y los refrigeradores de la morgue, subrayó.
El Hospital Indonesio está cerca del densamente poblado campamento de refugiados de Jabaliya, que fue blanco de dos intensos ataques aéreos israelíes esta semana, causantes de cientos de muertos y heridos.
Según datos oficiales, 14 de los 35 hospitales de Gaza no funcionan, como tampoco el 71 por ciento de los centros de atención primaria (51 de 72).
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