La Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) precisó en su último parte sobre el tema que 717 mil se cobijaron en 149 instalaciones administradas por la Agencia de Obras Públicas y Socorro de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo (Unrwa).
Otros 122 mil en hospitales, iglesias y edificios públicos, 110 mil en otras 89 escuelas y el resto residen con familias o amigos.
El hacinamiento es una preocupación importante porque más de 530 mil personas se refugian en 92 instalaciones de la Unrwa en el sur, subrayó la entidad.
Muchos desplazados internos buscan seguridad durmiendo en las calles, cerca de las instalaciones de esa agencia, lamentó.
La OCHA denunció que del total de víctimas mortales más de cuatro mil son menores de edad y otras dos mil 550 mujeres.
Unas dos mil 260 personas fueron reportadas como desaparecidas en el enclave costero, incluidos mil 270 niños, subrayó.
La agencia de la ONU alertó que ese territorio continúa sometido a un apagón total desde el 11 de octubre, tras la interrupción del suministro de electricidad y combustible por parte de Israel.
Las autoridades israelíes mantienen su prohibición de permitir la entrada de combustible, que se necesita desesperadamente para hacer funcionar los generadores eléctricos, apuntó.
Como ejemplo, resaltó que los principales generadores de electricidad de los hospitales Al-Shifa, el más grande de Gaza, e Indonesio paralizaron sus labores.
Al respecto, señaló que, desde el inicio de las hostilidades, 14 de los 35 hospitales y 51 de todos los centros de atención primaria de salud dejaron de funcionar.
Según el Programa Mundial de Alimentos, las existencias de algunos alimentos esenciales como el arroz, el aceite vegetal y las legumbres están a punto de agotarse en los próximos días, alertó.
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