Durante una reunión aquí con representantes del CICR, Fares denunció los sistemáticos maltratos que reciben los reclusos palestinos en las instalaciones penitenciarias del vecino país, destacó el portal noticioso Al Quds.
En ese sentido, criticó los abusos, agresiones y privaciones de derechos a que son sometidos sus compatriotas en las cárceles israelíes, en especial tras el nuevo ciclo de violencia, iniciado el 7 de octubre.
Fares renovó su llamado durante un encuentro posterior con el embajador de Países Bajos, Michel Rentenaar.
El funcionario llamó a esa nación europea a utilizar su influencia sobre Israel para detener la actual agresión contra el pueblo palestino y sus ataques contra los detenidos.
Desde el comienzo de la guerra nuestros presos fueron aislados dentro de sus celdas, les arrebataron todas sus pertenencias, incluidas ropa, mantas, utensilios de cocina y electrodomésticos y se les privó de agua potable y de baños en las duchas, denunció.
Las autoridades israelíes también confiscaron sus radios, impidieron la entrada de periódicos y redujeron las cantidades de alimentos, mientras intensificaron los maltratos y las redadas, subrayó.
El Movimiento de Resistencia Islámica (Hamas) y otras milicias en la Franja de Gaza afirmaron estar listas para canjear a los más de 200 prisioneros israelíes y extranjeros en su poder por los seis mil detenidos palestinos en ese país.
lam/rob