Los ataques que se extienden por más de un mes contra objetivos en el enclave causaron la destrucción o el daño del 45 por ciento de todas las unidades de vivienda en la Franja, señaló el experto al advertir que la destrucción tiene «un costo tremendo en vidas humanas».
«Llevar a cabo las hostilidades a sabiendas de que destruirán y dañarán sistemáticamente viviendas e infraestructuras civiles, haciendo que una ciudad entera, como la ciudad de Gaza, sea inhabitable para los civiles es un crimen de guerra», alertó Rajagopal.
El bombardeo sistemático o generalizado de viviendas, bienes civiles e infraestructuras está estrictamente prohibido por el derecho internacional, remarcó el relator.
Al mismo tiempo advirtió que cuando estos actos están dirigidos contra la población civil, también constituyen crímenes de lesa humanidad.
El experto reconoció otras violaciones como la orden de evacuar el norte de la Franja de Gaza, que se emitió a pesar de la falta de refugio adecuado o asistencia para los desplazados, sin acceso al agua, alimentos, combustible y medicinas.
Tras esa directiva, Israel atacó repetidamente las rutas de evacuación y las zonas supuestamente seguras, lo que evidencia una violación cruel y flagrante del derecho internacional humanitario, dijo además.
Este se basa en la distinción entre objetivos civiles y militares remarcó al reconocer el continuo lanzamiento de cohetes indiscriminado por parte de Hamas desde Gaza y otros lugares también como un crimen de guerra.
mgt/ebr