«Uno de los ámbitos clave de nuestra cooperación energética con Rusia es la interacción en materia del átomo pacífico. Existen distintas opiniones sobre la conveniencia de construir una central nuclear en nuestro país”, destacó el mandatario a la prensa rusa y kazaja reunida en Astaná.
Tokayev recordó que este país es el primero en el mundo en cuanto a la extracción de uranio, y también tiene su propia producción de componentes de combustible nuclear y acceso a servicios para el enriquecimiento de isótopos.
La planta metalúrgica de Ulba produce combustible nuclear acabado para las centrales nucleares eléctricas de China, recordó al respecto el jefe de Estado.
Tokáyev añadió que muchos ciudadanos y expertos se preocupan por la seguridad de las centrales nucleares. «Y esto es comprensible, dado el trágico legado que dejó el polígono de Semipalátinsk.
Apreciamos mucho la ayuda ofrecida por la parte rusa para construir una central nuclear en Kazajistán. Y la decisión final sobre esta cuestión se tomará en función de los resultados de un referéndum».
El 1 de septiembre, el presidente de Kazajstán propuso en un mensaje a la nación someter a un referéndum nacional la cuestión sobre la construcción de una planta atómica.
En su opinión, el país necesita continuar las audiencias públicas y una amplia discusión sobre el tema.
Las autoridades kazajas estudian varios posibles proveedores de la tecnología nuclear, entre ellos la china CNNC, la surcoreana KHNP, la rusa Rosatom y la francesa EDF.
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