Según un comunicado, los vehículos blindados están cerca de los hospitales al-Rantisi, al-Nasr, el Oftalmológico y el de Salud Mental.
En esas áreas también hay muchas escuelas y edificios residenciales, alertaron las fuentes médicas.
En ese contexto, la Cancillería palestina acusó este viernes a Israel de “secuestrar los hospitales (en la Franja) como rehenes para extorsionar” a la comunidad internacional.
La vecina nación continúa su asedio contra esas instalaciones para chantajear a el mundo con el fin de obtener beneficios políticos y obligar a los palestinos a trasladarse al sur en un “nuevo episodio de genocidio”, alertó.
El Hospital Pediátrico al-Rantisi dejó de funcionar ayer tras acabarse el combustible, lo cual amenaza la vida a 38 niños palestinos que sufren de insuficiencia renal.
“Se oyen muchos disparos y sabemos que los tanques se están acercando al Hospital al-Shifa”, señaló a la televisora Al Jazeera el doctor Ahmed Mokhallalati, cirujano de ese centro.
En un video publicado en Instagram, el galeno Ezzedine Lulu, reafirmó que los trabajadores no abandonarán el recinto pese a las amenazas israelíes
“El hospital con todo adentro será bombardeado en cualquier momento. Las fuerzas de ocupación israelíes golpearon partes para presionar a todos los que estaban dentro, incluidos los pacientes, las víctimas y el personal médico, para que se fueran”, advirtió.
No podemos abandonar nuestros deberes. No podemos dejar sin ayuda a miles de heridos y pacientes. No nos vamos a ningún lugar. Solo saldremos como vencedores o mártires, concluyó.
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