En entrevista concedida al diario local Ad-Diyar, el exdirector de Seguridad General indicó que la idea de la disuasión y el ejército invencible israelí cayó después del 7 de octubre con el comienzo de la operación de la resistencia palestina Diluvio de Al-Aqsa.
Al respecto, precisó que tras la guerra habrá responsabilidades a determinar, juicios e investigaciones que afectarán al primer ministro israelí y «desde ahora hago responsable a Benjamín Netanyahu».
Con el apoyo a Israel y la presencia de las flotas, Netanyahu intenta protegerse y tiene dos opciones: si la guerra termina, acudirá a la comisión de investigación, o eliminar a los movimientos de resistencia y mostrarse como un héroe, por lo que se convirtió en prisionero de su proyecto personal, valoró.
Ibrahim consideró que Israel no es un Estado, es una posición y una entidad avanzada de Occidente para desempeñar una función y defender sus intereses.
En este sentido, el alto militar respaldó el regreso de la antigua Palestina, con judíos, musulmanes y cristianos, en una tierra en armonía y paz sin ningún problema.
Con más de 40 años de servicios en el Ejército y la Seguridad, Ibrahim tiene un aval como mediador en asuntos regionales y en medio de la agresión a Gaza expresó su rechazo a la posición estadounidense de no obligar a Israel a aceptar un alto al fuego.
A propósito, respaldó la necesidad de eliminar la posibilidad de ampliar la guerra a la región, y aseguró que en caso de un ataque a Líbano siempre estará detrás de la resistencia y del Ejército.
En esta línea de mensaje, manifestó estar a favor de preservar los intereses palestinos y evitar que Líbano sufra una guerra grande.
Respecto a un cese del fuego, enfatizó en que Israel no está en la posición del vencedor y Hamas es firme y tiene ventaja en Gaza, así como sus condiciones para alcanzar esta tregua.
En relación con la operación de intercambio de prisioneros, puntualizó que fue detenida como resultado de la intransigencia israelí, que negó evacuar a los civiles heridos a Egipto ante la incapacidad de los hospitales de Gaza.
Para el general, ni Estados Unidos ni Israel podrán gobernar en la Franja, pues es destino de los palestinos.
Sobre este tema, agregó que «nuestras experiencias dicen que después de la guerra de 2006, Hizbulah se hizo más fuerte en todos los niveles. Espero que el resultado en Gaza sea el mismo que ocurrió en Líbano.»
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