«He dispuesto al equipo de transición buscar eficiencia y responsabilidad. Que se trabaje con el gobierno saliente y se gaste menos del 50 por ciento de la cantidad presupuestada», señaló el futuro gobernante en su cuenta de la plataforma X.
En los últimos días hubo cuestionamientos porque las autoridades encargadas de la transición destinarían demasiados fondos a los actos protocolares mientras el país enfrenta una crisis fiscal.
Los 600 mil dólares previstos incluían coordinación, transporte, alimentación, atención y regalos para los invitados internacionales, así como una cena de despedida del presidente Guillermo Lasso, en el Palacio de Carondelet, y un almuerzo de bienvenida para el nuevo jefe de Estado.
La posesión de Daniel Noboa está prevista para el 23 de noviembre, según anticipó la asambleísta electa Pierina Correa, quien presidirá la sesión inaugural de la Asamblea Nacional, sin embargo, aún no existe una convocatoria oficial al evento.
Con un total de cinco millones 251 mil votos, Noboa y su compañera de fórmula, Verónica Abad, ganaron los sufragios del pasado 15 de octubre frente a la candidata de la Revolución Ciudadana, Luisa González.
Se espera que el próximo 15 de noviembre, el Consejo Nacional Electoral entregue a los vencedores de las votaciones el documento que los habilita para ejercer sus funciones.
El joven gobernante recibirá un país sumido en la peor ola de inseguridad de la historia, una crisis energética y problemas en su economía.
Para este martes está prevista una reunión entre los equipos encargados de la seguridad de la actual administración y del Ejecutivo entrante, aunque aún no se sabe quiénes serán los responsables de esa área en el gabinete de Noboa.
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