Los desbordamientos lanzaron a los caminos a 700 mil personas desplazada de sus hogares y lo peor: la situación permanecerá e incluso empeorará hasta el próximo día 24 y causará más muertes, destrucción y encarecimiento de los alimentos, advirtió la Agencia de Administración de Desastres somalí.
El total de personas damnificadas por el fenómeno climático en Somalia asciende ahora a un millón 700 mil, según las estadísticas recopiladas el fin de semana pasado la Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios.
La situación asimismo abarca otros países, entre ellos Kenya y Etiopía, en los cuales también ocurren inundaciones relámpago y donde miles de personas tuvieron que abandonar sus lugares de residencia y sus cultivos.
Los aguaceros llegaron de manera inesperada a esta parte del planeta después de la peor sequía durante varias temporadas de lluvia sin una gota de agua.
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