Las autoridades congoleñas expresaron mediante un comunicado sus condolencias a los familiares de las víctimas y decretaron un día de duelo con la bandera a media asta, cierre de bares, salas de baile, establecimientos de bebidas y lugares festivos.
El portavoz del gobierno congoleño y ministro de Comunicación, Thierry Moungalla, al leer la víspera la nota de la comisión de crisis creada ante el suceso, precisó la muerte de 31 personas, mientras otras 145 resultaron heridas; 15 de ellas se mantenían en observación hospitalaria, cuatro en estado grave.
Según los agentes encargados de la seguridad del estadio donde se realizaría la operación de reclutamiento del Ejército, en el lugar había varios miles de jóvenes candidatos que se juntaron en la noche del lunes 20 al martes 21 de noviembre para ser los primeros.
Algunos forzaron la puerta, otros saltaron un muro y el resultado fue la tragedia, actualmente bajo investigación.
Moungalla informó que la indagación judicial abierta por el fiscal contará con una investigación administrativa mixta donde se unirán la policía y las Fuerzas Armadas del Congo.
La comisión deberá determinar las causas de la tragedia y presentar sus conclusiones en los próximos días.
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