Datos de la Oficina Nacional de Estadísticas y Censos (ONEC) así lo confirman y, por ejemplo, la misma cantidad de alimentos hace un año cuesta 17.95 dólares más en octubre pasado.
En los últimos 12 meses los precios de frijoles, frutas y huevos fueron las más que drenaron los bolsillos de los salvadoreños.
La ONEC precisó que los productos que componen la canasta básica urbana costaron 257.81 dólares el mes pasado, 7,5 por ciento más o 17.95 dólares en relación a igual fecha de 2022.
Las alza obligaron a algunas familias a reducir el número de productos en sus comidas, mientras otras bajaron la cantidad de comidas al día a dos, sin contar que algunos a veces no comen.
Algunas personas del campo e incluso asalariados en la ciudad no consiguen en ocasiones más de 80 dólares a la quincena lo que hace más crítica la situación, según los datos de entidad.
Aparte de la subida en los últimos 12 meses del precio de las raciones diarias de frijoles y frutas, las verduras, también las carnes, las tortillas, la leche fluida y huevos, reportaron incrementos en el último año. Algunas amas de casa dicen, incluso, que comer huevo es un lujo.
Medios salvadoreños como el diario La Prensa Gráfica aseguran que la pérdida de poder adquisitivo se acelerará más y hablar de lo cara que está la vida se convirtió en un tema popular y en la zona rural no es la excepción, pues allí como en la urbana, las familias pagaron 193.47 por alimentarse, 5.5 por ciento más o 10.12 dólares comparando con octubre de 2022.
La situación es crítica considerando que el aumento del salario mínimo de 2021, de 20 por ciento, se queda corto ante la subida de la canasta básica de alimentos urbana, de 26 por ciento, y 31 por ciento en la zona rural como se reporta ahora.
Sobre este tema Mauricio Choussy, expresidente del Banco Central de la Reserva (BCR) opinó recientemente que con la llegada de diciembre “todo va a subir más y después de esto viene la época escolar. La verdad es que el dinero no alcanza, ahorita la situación está poniéndose bien difícil porque todo ha subido, tanto la canasta básica de alimentos como la medicina».
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