Las sanciones y el bloqueo agravaron aún más estos problemas y obstaculizaron la recuperación en diversos campos, dijo el jefe del ejecutivo en una reunión dedicada a debatir el informe nacional sobre el estado del entorno en Siria.
La guerra ha dejado un significativo impacto en el clima, ya sea a través de la refinación primitiva del petróleo o la salida de servicio de la planta de energía hidráulica en la presa del Éufrates.
Explicó que Siria va a estar presente en la Cumbre del Grupo de los 77 y China sobre los Cambios Climáticos que se celebrará a principios de diciembre en Emiratos Árabes Unidos, y planteará sus planes y visiones sobre esta cuestión.
Damasco está comprometido con todos los acuerdos que firmó en el ámbito del medio ambiente y también con la participación de energías limpias, ya que es parte de este mundo y cree que el medio ambiente es responsabilidad de la comunidad internacional en su conjunto y no de un solo país, detalló el jefe de Gobierno.
A su vez, el ministro de Administración Local y Medio Ambiente, Hussein Makhlouf, dijo que la guerra terrorista creó un desequilibrio en la distribución demográfica y desplazamientos que ejercieron grandes presiones medioambientales, especialmente en las zonas urbanas con grandes cantidades de escombros en sus barrios destruidos.
Uno de los desafíos más graves que nos espera es la presencia de decenas de miles de hectáreas de tierras agrícolas contaminadas como resultado de la refinación ilegal de petróleo en las regiones del noreste y ello se debe al terrorismo y sus patrocinadores, denunció el Titular. Agregó que esto provocó la contaminación de las aguas subterráneas y el aumento de las tasas de contaminación del aire en grandes áreas, lo que requiere tratamiento ambiental cualitativo a largo plazo.
Makhlouf aclaró que debido al cambio climático, las zonas fronterizas se han convertido en foco de tormentas de arena, lo que requiere esfuerzos regionales concertados a través de programas reales para hacer frente a este fenómeno peligroso para la salud pública.
Perdimos grandes áreas de hectáreas de bosques como resultado de incendios provocados y la tala excesiva de árboles para usarlos como leña por la falta de energía, y estos bosques anteriormente constituían un hábitat para la biodiversidad y un pulmón para las comunidades locales, destacó.
El ministro reveló que el informe integral sobre el estado del medio ambiente en Siria identificó 23 áreas o enclaves que se vieron gravemente afectados por el cambio climático y tuvieron un impacto negativo en las áreas urbanas y tierras agrícolas.
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