En el cierre del homenaje a la periodista Farah Omar, el camarógrafo Rabih Al-Maamari y el colaborador Hussein Aquil, el destacado comunicador subrayó el compromiso moral y humanitario con la causa en todo el mundo.
Al mismo tiempo, agradeció al gobierno de Líbano por presentar una denuncia ante las Naciones Unidas contra Israel por el asesinato del equipo de prensa de Al Mayadeen, mientras ejercía su labor de informar la verdad en el sur del país.
El reconocido periodista puntualizó que la red asignará becas de estudio anuales a nombre de Farah Omar y Rabih Al-Maamari en una universidad árabe o del Sur global.
Al dirigirse a los medios de comunicación, Ben Jeddou resaltó que Farah, Rabih y Hussein son mártires, no muertos, y rechazó cualquier intento por restar valor a su testimonio.
En esta línea de mensaje, destacó que Al Mayadeen no retrocederá en la defensa de los niños de Gaza, Palestina y la causa.
Subrayó que la multiplataforma comunicacional no hizo diferencias entre el pueblo de Palestina dentro del país, Gaza o Cisjordania, y no trabajó para crear conflictos.
Al respecto, indicó que la red con sede en Líbano no debería ser bloqueada en Cisjordania, «ni ningún palestino debería aceptarlo».
En este sentido, manifestó que la referencia de Al Mayadeen es la cuestión palestina, y «no está permitido aceptar impedirle trabajar en Cisjordania, y sabemos que la ocupación le teme».
Sobre la censura impuesta por el gobierno israelí, Ben Jeddou afirmó: «el campo de batalla está entre nosotros, y le digo al personal de Al Mayadeen no tengan miedo».
Este martes, dirigentes políticos, internacionalistas, diplomáticos, comunicadores y líderes religiosos nacionales y árabes acompañaron al canal panárabe en el homenaje a Farah, Rabih y Hussein, caídos hace una semana en un bombardeo israelí a la localidad de Tayr Harfa, mientras cubrían los acontecimientos en el sur libanés.
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