En declaraciones a la televisora Al Jazeera, Ashraf Al-Qudra, vocero de las autoridades de salud del enclave, señaló que en la actualidad están fuera de servicio 28 hospitales y 63 centros de atención primaria.
“La ocupación israelí golpeó deliberadamente la infraestructura de los hospitales y desplazó a la población del norte al sur, incluido el personal médico”, criticó el funcionario.
Al-Qudra señaló que los bombardeos indiscriminados sobre el enclave costero también mataron a numerosos galenos y personal médico.
Fuimos atacados directamente por las Fuerzas Armadas de ese país, que comenzaron a asfixiar el sistema de salud desde el primer día de la agresión al cortar los suministros médicos, el combustible y la electricidad, recalcó.
Con respecto al volumen de ayuda que ingresó a la Franja tras cuatro días de tregua entre Hamas e Israel, señaló que es menor de lo esperado.
Desafortunadamente tampoco se dirigió a los hospitales ubicados en el norte del territorio, donde el sistema está colapsado, explicó.
El Ejército israelí cortó en dos la Franja de Gaza y obligó a la población de la región septentrional a huir hacia la meridional, en medio de fuertes críticas internacionales por el desplazamiento forzado.
En el norte los militares ordenaron la evacuación de hospitales clave como el Indonesio y el Al-Shifa, pese a estar llenos de heridos y refugiados.
Al-Qudra pidió al mundo acoger a lesionados y enfermos palestinos porque en el enclave costero en muchos casos es imposible brindar tratamientos adecuados por falta de insumos.
Desde el comienzo de la operación castrense, más de 15 mil palestinos murieron allí, seis mil de ellos menores de edad.
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