El sondeo ejecutado por Elabe para la cadena BFM TV muestra que un 45 por ciento del millar de entrevistados se declaró preocupado por esa situación y un 46 muy preocupado, mientras el resto (un nueve por ciento) no reflejó tal criterio.
De acuerdo con ese estudio, una amplia mayoría de los participantes en la encuesta no consideró una simple riña lo ocurrido en Crépol hace 12 días, y sí una prueba del quiebre social generalizado.
En la noche del 18 al 19 de noviembre en la localidad del suroriental departamento de Drôme fue asesinado Thomas de 16 años y varias personas resultaron heridas, en un acto definido por sectores de la extrema derecha como motivado por el “odio antiblanco”, generando marchas en algunas ciudades del país.
Antes las tensiones, el ministro del Interior Gérald Darmanin anunció el martes la disolución de tres grupos de ultraderecha, entre ellos la violenta División Martel, y afirmó que Francia no permitirá que se intente reemplazar al Estado y sus instituciones, en particular las encargadas de hacer justicia y velar por el orden público.
La encuesta de Elabe para BFM TV también recoge la preocupación ciudadana por hechos que van desde las agresiones contra personas y el tráfico de drogas hasta los ataques sexuales y la falta de civismo.
A partir de estas opiniones, más de la mitad demandó que los condenados por delitos cumplan realmente las penas dictadas y el endurecimiento del Código Penal.
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