El poder de fuego de los emboscados fue tal que los militares y milicianos progubernamentales que los acompañaban optaron por retirarse tras rescatar a los cuatro muertos y los heridos en sus filas, según el testimonio del líder de una unidad antislamista que se identificó como Musa.
En Borno radica el cuartel general de Boko Haram, afiliado al igual que el Iswap, cuyo baluarte está en la zona del lago Chad, a Estado Islámico aunque ambos están enfrentados por razones tácticas y disputas por el liderazgo que en ocasiones desembocan en choques armados.
Ambos constituyen el principal conflicto, aunque no el único, que tiene que enfrentar el flamante mandatario nigeriano, Ahmed Bola Tinubu, electo en los turbulentos comicios presidenciales de marzo pasado.
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