Así dejó constancia el vicecanciller azerí Elnur Mammadov, en una entrevista exclusiva con Prensa Latina en esta capital, en la que resaltó como parte del avance de la cooperación médica la posible apertura de un hospital en su país, donde laborarían galenos cubanos.
Hace unos días, tuvimos aquí la presencia de nuestro ministro de Salud que sostuvo encuentros con la parte cubana sobre propuestas científicas conjuntas y esperamos tener buenas noticias al respecto en breve, afirmó.
En comentario sobre sus reuniones en esta capital con autoridades cubanas, consideró que el más importante resultado de los últimos años fue haber llegado al intercambio completo de los niveles de representación entre las embajadas de ambos países.
Cuba ha tenido embajada en Azerbaiyán desde 2007 y desde el año pasado ya ahora ambos estados poseen una representación a nivel de embajadores, comentó el funcionario azerí en un encuentro en el capitalino hotel Gran Muthu Habana.
Otra área de cooperación es la educación, pues los estudiantes cubanos, estimó, son elegibles para las ofertas de becas que ofrece Bakú para miembros del Movimiento de Países No Alineados (Mnoal). La cifra aumentó de 20 a 100 plazas, explicó.
El diplomático también se refirió a la lucha de Cuba contra el genocida bloqueo impuesto por Estados Unidos, al aclarar que, en la votación de la resolución cubana en la ONU contra ese cerco, en 1993, su país fue el único en apoyarla en el espacio pos-soviético. Desde entonces, Azerbaiyán lo ha hecho por más de 30 años.
Recientemente, en una votación en la Asamblea General de la ONU contra el bloqueo, 187 países votaron a favor de la resolución cubana, recordó.
Al mismo tiempo, como presidente del Mnoal, mantenemos el tema del bloqueo norteamericano y levantamos nuestra denuncia contra ese cerco en cada plataforma internacional posible, aclaró el diplomático azerí.
La preocupación, enfatizó, también está dada por las consecuencias que la aplicación del bloqueo ocasiona a la población de Cuba.
Uno de los efectos más preocupantes de la política de cerco económico estadounidense es que ataca a naciones deseosas de mantener relaciones comerciales con Cuba e impide esa actividad, comentó Mammadov.
Al referirse a las perspectivas de la firma de un acuerdo de paz entre Azerbaiyán y Armenia, el diplomático recordó que, en tiempos de la Unión Soviética, lo que calificó de agresión armenia contra su país dejó bajo control de Ereván a más del 20 por ciento del territorio azerí.
Para 1994, alcanzamos un cese al fuego con Armenia, donde gran parte del territorio azerbaiyano quedó bajo control armenio, admitió Mammadov.
En 1993, el Consejo de Seguridad de la ONU aprobó cuatro resoluciones sobre la agresión de Armenia contra Azerbaiyán que demandaban la salida completa e incondicional de ese país de territorios ocupados, acotó.
Un segundo conflicto armado se produjo en septiembre de 2020. Como resultado de ese diferendo, pudimos liberar a nuestros territorios internacionalmente reconocidos, destacó el vicecanciller.
Basado en iniciativas propuestas por Azerbaiyán, en octubre del pasado año comenzamos pláticas para establecer los parámetros de un acuerdo de paz, en apego a principios del derecho internacional, afirmó.
En octubre de este año, realizamos rondas, auspiciadas por varios estados, para tantear las posibilidades de un arreglo pacífico, señaló.
Tras la liberación de los territorios, entre ellos nueve ciudades azeríes, la mayoría de ellas se encontraba en estado deplorable, incluidos sus centros culturales y religiosos, hospitales y la infraestructura, comentó el viceministro de Asuntos Exteriores.
Además, esas zonas están infestadas de minas, pues Armenia sembró allí más de un millón de esos artefactos, y eso dificulta los trabajos de rehabilitación, estimó el funcionario en intercambio con Prensa Latina.
Desde el fin de la segunda confrontación, pudimos regresar a unos cinco mil étnicos azeríes desplazados de sus viviendas por la ocupación y buscamos llegar en 2026 a 140 mil personas, adelantó el diplomático.
Al hablar sobre el papel de su país al frente del Mnoal, Mammadov aclaró que Azerbaiyán se convirtió en miembro de esa organización en 2011 y en apenas ocho años fue capaz de asumir la presidencia de esa institucional internacional.
Tal reto era por tres años, pero la presidencia azerí fue extendida por un año más, hasta 2023 y vamos a entregar la jefatura en enero próximo, confirmó el vicecanciller.
Lamentablemente, la presidencia azerí del Mnoal coincidió con una crisis global de la salud, en medio de la pandemia de Covid-19, y eso, claro está, afectó negativamente la agenda nuestra de iniciativas.
En mayo de este año, como presidente del Mnoal, Azerbaiyán lanzó una campaña global para la recuperación pos-pandémica para África y países caribeños, con un millón de dólares para cada uno de estos dos programas.
Como parte de ese programa, trabajamos con Cuba en varios proyectos que igualmente significó un mayor financiamiento para esta nación y un incremento de los nexos bilaterales, estimó el diplomático.
Durante la pandemia, señaló, reforzamos la coordinación de esfuerzos en la lucha global contra ese flagelo y ello llevó a adoptar una resolución en diciembre de 2020 de la Asamblea General de la ONU sobre un llamado de acciones de la comunidad internacional contra la Covid-19.
También llevamos una iniciativa al Consejo de Derechos Humanos, que en marzo de 2021 aprobó una resolución de condena a la discriminación en el acceso y distribución de vacunas contra el virus de la Covid-19, destacó.
Además, propusimos la creación de una red parlamentaria del Mnoal, una iniciativa para el intercambio de ideas y otra relacionada con la agenda de la mujer y su papel en los parlamentos. Nosotros creamos una plataforma de miembros del Mnoal con ese fin, acotó el funcionario.
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