En la abultada lista de resultados positivos en estas casi tres décadas sobresale la inclusión en esas investigaciones de una cifra superior a los 30 mil pacientes de diferentes entidades, para valorar medicamentos para el tratamiento del cáncer, y otras enfermedades autoinmune y neurodegenerativas.
A ello su suma haber alcanzado el registro de cinco productos generados en sus laboratorios y plantas de producción, explicó la directora de investigaciones clínicas del CIM, doctora Tania Crombet, quien calificó tales éxitos de hitos en la historia de esa institución.
La especialista destacó que entre los fármacos con esa condición, en Cuba y en otros 25 países, está el Nimotuzumab, un anticuerpo monoclonal humanizado terapéutico empleado contra el cáncer de cabeza y cuello, pulmonar y de páncreas, y que fue aprobado para su uso de emergencia en pacientes con enfermedad severa de Covid-19.
El CIM también cuenta con el registro de Cimavax, un conjugado químico de factor de crecimiento epidérmico humano recombinante para el tratamiento del cáncer de pulmón avanzado, con la facultad de controlar la progresión de la enfermedad, prolongar la supervivencia y mejorar la calidad de vida, lo que facilitó que cinco naciones reconocieran sus bondades.
Crombet significó que en estos 29 años se han tratado con productos del CIM más de 150 mil cubanos y fuera del país más de tres millones 500 mil personas han sido beneficiados con medicamentos creados por los investigadores y técnicos de esa institución biotecnológica.
En relación con la actividad en el exterior la experta destacó la participación en 50 ensayos clínicos en Asia, Europa, América Latina, Canadá y Estados Unidos, país este último donde se realizan importantes estudios en cáncer avanzado con indicadores muy alentadores de supervivencia de 30 meses en pacientes sometidos a terapias y tratamientos.
De gran relevancia ha sido la participación de más de cinco profesionales en estas investigaciones y ensayos clínicos de Biocubafarma y del Ministerio de Salud, incluidos hospitales y policlínicos, comentó la directora de investigaciones clínicas del CIM,
Inaugurado el 5 de diciembre de 1994 por el líder de la Revolución cubana Fidel Castro, el CIM nació como parte de su estrategia de impulsar la biotecnología en función de nuevos productos farmacéuticos y diagnóstico-tratamiento, en los difíciles años de crisis económica en la década de los 90, conocido como período especial.
Actualmente el CIM es una empresa de alta tecnología del Grupo Biocubafarma, que funciona con el principio de ciclo cerrado (investigación-desarrollo, producción y comercialización) para lo cual cuenta con tres plantas productivas y cuatro empresas mixtas en China, Tailandia, Singapur y Estados Unidos.
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