De acuerdo con un comunicado oficial, la intensa campaña de bombardeos del Ejército sionista desde el pasado 7 de octubre también ha provocado que de 35 hospitales gazatíes 27 estén fuera de servicio.
Añadió que los centros de salud fueron afectados, además, por la falta de combustible, cuyo suministro fue cortado por Tel Aviv, junto a la entrega de agua, medicinas y otros medios de vida.
El informe destacó que la distribución de ayuda humanitaria se limita a la gobernación de Rafah, con importantes interrupciones en Khan Yunis, en tanto la región central sigue aislada del sur.
Las acciones bélicas de las Fuerzas Armadas israelíes también destruyeron más del 60 por ciento de las viviendas en Gaza, con unas 56 mil unidades completamente pulverizadas, precisó el documento.
Ante la compleja situación reinante, la víspera el Secretario General de Naciones Unidas, António Guterres, instó a la comunidad internacional a utilizar toda su influencia para evitar una mayor escalada del conflicto y pidió a los miembros del Consejo de Seguridad que presionen para el logro de un alto el fuego.
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