Así lo indicó Eduardo Franco Loor, uno de los integrantes del equipo legal del exfuncioanrio, quien dará más detalles sobre el caso durante esta jornada en entrevistas a medios locales.
Se esperaba que Glas hiciera la víspera este pedido de asilo, pero hasta el momento no se ha confirmado si finalmente inició el proceso.
A su vez, este jueves la Asamblea Nacional (Parlamento) deberá analizar la petición del juez, Luis Rivera, sobre si autoriza o no el enjuiciamiento penal del exvicegobernante por el presunto delito de peculado en el caso denominado Reconstrucción de Manabí.
Existe polémica sobre si el Legislativo tiene competencia para discutir la cuestión, porque esa instancia sólo tiene facultad cuando las autoridades están en funciones.
Glas, quien fue vicepresidente de Rafael Correa (2007-2017) y Lenín Moreno (2017-2021), ingresó el pasado domingo en la legación diplomática de México en Quito, luego que la Fiscalía pidiera su comparecencia para investigaciones.
El domingo, la Cancillería ecuatoriana advirtió al gobierno de México, en una nota verbal, que conceder asilo a Glas no sería lícito.
“Ecuador exhorta a las autoridades mexicanas a que inviten al señor Glas a cooperar con las autoridades policiales y se encuentra expectante de la cooperación que México brinde para tal efecto”, dijo la Cancillería ecuatoriana en su cuenta de X.
Glas, miembro del movimiento Revolución Ciudadana (RC), es considerado uno de los símbolos del “lawfare” en Ecuador, donde la persecución desatada por el gobierno de Moreno contra seguidores de Correa obligó a muchos de ellos a exiliarse.
El antiguo vicegobernante recibió el beneficio de la prelibertad el pasado 28 de noviembre, luego de la unificación de dos penas de cárcel de seis y ocho años por los casos Odebrecht y Sobornos, respectivamente.
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