Cuando en octubre se anunció que el Wolverhampton-Chelsea iba a ser el primer partido en disputarse en esta fecha navideña tan señalada desde aquel Leeds-Manchester United jugado en 1995, el técnico argentino Mauricio Pochettino mostró su disconformidad por una razón muy especial: la noche anterior cumplía aniversario de boda.
Y todo resultó agrio para Pochettino y los Blues, luego que Mario Lemina, anotase de cabeza al minuto 51, tras un córner botado por el centrocampista español Pablo Sarabia para poner el 0-1 a favor de los Wolves.
Matt Doherty amplió el marcador para delirio de la afición del Molineux Stadium, tras nuevamente quedar retratada la defensa visitante por el mal despeje del defensa Benoît Badiashile tras un centro de Hugo Bueno.
Christopher Nkunku , recuperado de su larga lesión, marcó en su debut en la Premier con un perfecto cabezazo cruzado en un centro de Sterling, para acercar 2-1 al Chelsea, que finalmente no pudo evitar el desastre ni el rostro amargo de Pochettino.
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