En el documento el gobernante señaló que la Casa Militar Presidencial proporcionará seguridad y protección a la vicepresidenta, su cónyuge y familiares “cuando se encuentre prestando funciones en el Ecuador”.
Igualmente, el decreto precisa que contarán con protección, además del jefe de Estado, el secretario general de la Administración Pública y el Gabinete de la Presidencia, sus cónyuges y familiares, “con base al informe técnico y perfil de riesgo”.
De esa forma, Abad, que llegó a Tel Aviv el pasado 10 de diciembre por orden de Noboa, no contará con seguridad especial para su cargo.
Más temprano este martes se conoció que el Ministerio de Trabajo determinó que podrá incorporar a su equipo de trabajo hasta tres servidores.
Los roces entre la funcionaria y el presidente han sido evidentes desde la campaña electoral, cuando ni siquiera aparecían juntos, y luego, pocos días después de tomar posesión, Noboa la designó “colaboradora de la paz” y ”embajadora en representación permanente” en Israel.
Organizaciones políticas y de derechos humanos calificaron la decisión de enviar a Abad a Israel como un hecho inusual en la política exterior de Ecuador y manifestaron que una designación de este alcance, con connotación global en el actual contexto, debió recaer en una persona de reconocida trayectoria.
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