Según confirmó a la multiplataforma comunicacional un alto dirigente de la Yihad Islámica, el primer punto condiciona un alto al fuego y la retirada completa de las fuerzas israelíes de la Franja de Gaza.
Además, la Resistencia palestina exigió la reconstrucción del enclave costero con garantías respaldadas por el Consejo de Seguridad de la ONU.
En este contexto, el dirigente enfatizó que cualquier discusión sobre intercambios de prisioneros u otros asuntos se llevará a cabo después de la implementación del cese de la agresión y la retirada del ente de Tel Aviv.
La respuesta de la Yihad Islámica y Hamas ocurrió después del anuncio de la iniciativa de Egipto para acercar las posturas entre las partes involucradas con el objetivo de detener el derramamiento de sangre palestina en Gaza.
Al respecto, el plan de paz egipcio consta de tres fases interrelacionadas que conducirán a un alto al fuego, después de escuchar las opiniones de los interesados, reflejaron los medios de prensa.
Con anterioridad, el secretario general de Yihad Islámica, Ziad al-Nakhalah, afirmó que no habría acuerdos de intercambio de prisioneros u otros, hasta el fin de la agresión israelí en Gaza.
Al mismo tiempo, el dirigente de Hamas en Líbano, Osama Hamdan enfatizó en reiteradas ocasiones la posición de un cese total del ataque sionista contra la Franja para cualquier intercambio de prisioneros mediante negociaciones de acuerdo con los intereses de los palestinos.
De acuerdo con el representante de la Resistencia, la administración del presidente Joe Biden dirige la guerra y es responsable de la sangre derramada por los palestinos en la Franja.
Más de 22 mil palestinos fallecidos y cifra superior a los 57 mil heridos exponen el genocidio israelí en la Franja de Gaza tras casi tres meses de masacres, bombardeo y asedio permanente de las fuerzas sionistas.
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